Por: Rolando Andrés López P.
Kevin Santiago Riveros Leal es un niño de 8 años, natural del municipio de Une (Cundinamarca). Vive en el campo con su familia, quiere tocar guitarra, montar en bicicleta, aprender también el acordeón, jugar fútbol… en fin, tiene ganas de hacer muchas cosas, de comerse el mundo. Pero tiene un problema. Nació con una parálisis cerebral tipo diplejia espástica, condición que altera la postura y la marcha del niño, lo mismo que la precisión manual de sus movimientos.
Su madre es su ángel guardián. Se llama Yohana Leal Simbaqueva. Siempre ha estado pendiente de todos los cuidados, tratamiento, citas médicas, terapias y toda la atención que necesita el niño. Desafortunadamente, no contó con la debida atención en la EPS que le corresponde a su municipio, Convida. Y esa situación fue lo que la movió a dirigirse a sus vecinos, la familia Gaona, quienes se han vuelto muy populares a través de un canal de YouTube llamado Nubia e hijos.
Los Gaona, conformados por la madre, Nubia Gaona, y sus hijos, Jeimer Alejandro y Arley David, comenzaron hace varios meses un canal virtual en el que suben sus experiencias y vivencias como campesinos desde una vereda localizada en el municipio de Une, Cundinamarca, a 50 kilómetros del casco urbano de Bogotá. Con la ayuda de unos vecinos suyos, Sigifredo Moreno y Juliana Zapata, quienes tienen un lote cerca pero viven en Bogotá, han logrado que su canal en YouTube sea todo un éxito y tenga más de 720.000 suscriptores a la fecha.
Aprovechando esa popularidad, los Gaona quisieron darle una mano a su pequeño vecino y decidieron hacer un video en el que piden ayuda para que las personas de buen corazón le colaboren, pues necesita ser operado con urgencia de las rodillas y los tobillos antes de que cumpla los 9 años.
El video llegó a varios medios de comunicación, entre ellos EL NIDO DEL CÓNDOR, los cuales pusieron manos a la obra para averiguar qué era lo que pasaba con Kevin Santiago. ¿Cuáles eran las razones de la demora en lograr la atención requerida por parte del menor de edad?
Gracias a un video
Kevin Santiago nació el 13 de diciembre de 2012. Hace menos de un mes que cumplió sus 8 años. Debido a un problema de hipoxia neonatal que lo atacó después del parto, la parálisis cerebral lo viene afectando. No obstante, su familia siempre ha sido un apoyo permanente en su vida, tanto su padre Jorge Adelmo Rivero, como sus dos hermanos. Y, por supuesto, su madre, Yohana Leal, quien está muy pendiente de las citas, los tratamientos y los medicamentos que deba tomar Kevin por causa de su enfermedad.
“Ha sido muy difícil. Incluso, yo puse una tutela en abril de 2014. Me tocó con tutela porque le habían ordenado al niño un caminador, pero no se lo habían autorizado. Le autorizaban las cosas en donde la EPS no tenía contrato. Yo llamaba y me decían que no había convenio. Debido a eso coloqué la tutela”, cuenta Yohana con desaliento.

Los médicos que atendían a Kevin en el Instituto Franklin Delano Roosevelt de Bogotá le dijeron a Yohana que el niño tiene unos derechos inalienables y éstos debían ser tutelados al 100 por ciento. Le hicieron unos exámenes y determinaron que Kevin necesitaba una silla de ruedas, pues ya está más grande y su cuerpo es más pesado. La orden se la dieron el 30 de agosto de este año pero en la EPS Convida no la aprobaron porque no tenía el “formato”.
“El fisiatra me dijo que no tenían por qué devolver la orden por la razón que estaban dando. Incluso el mismo fisiatra, en la orden que les volvió a dar, les escribió que no fueran a devolver al paciente con la excusa del formato”, señala la madre de Kevin. Su angustia por la situación del niño, a quien la EPS no le solucionaba sus problemas, la llevaba de aquí para allá, de consultorio en consultorio. Llegó a hablar con la personera municipal de Une, quien le manifestó que llenaría un formato de Peticiones, Quejas y Reclamos (PQR) y lo enviaría a Convida para que le resolvieran sus inconvenientes lo antes posible.
Desesperada por la situación no dudo en pedirle ayuda a la familia Gaona, quienes la ayudaron mediante el video, publicado el pasado miércoles 6 de enero, para que los medios de comunicación conocieran el caso. El remedio fue efectivo pues Yolanda relata que “hoy (viernes 8 de enero) me llamó la personera porque hasta ahora le habían respondido el PQR que ella había enviado a Convida… Yo creo que fue gracias al video”.
El mismo 6 de enero, sobre la 1 de la tarde, llamaron a Yohana de Convida para pedirle que volviera a llevar los papeles de Kevin. Los documentos con las autorizaciones ya estaban vencidos hacía tiempo, pero le dijeron que no importaba y que ya verían que se podía hacer. El jueves 7 de enero la volvieron a llamar de Convida, pero de la sede en Bogotá. Le confirmaron que ya habían generado las autorizaciones para que a Kevin lo vieran en Fisiatría para volver a ordenarle la silla de ruedas que desde hacía dos años no le habían suministrado.
“Este viernes 8 de enero me llamó la muchacha de Convida para que fuera al pueblo pues ya me tenían la autorización para la radiografía, para terapia y para unos exámenes que le habían pedido en fisiatría y ortopedia con el fin de adelantar lo de la cirugía. Ella misma me dijo que le había apartado la cita para los exámenes en Cáqueza el próximo martes a las 8 de la mañana. Tiene también otra cita para fisiatría que se la apartaron para el 15 de enero. Ya no importaba que los papeles estuvieran vencidos”, cuenta Yohana con satisfacción.
Desde la EPS Convida el doctor Germán Londoño, médico encargado del área de tutelas en esta entidad, respondió que la situación de demora en la atención a Kevin Santiago se debía, primero que todo, a que por su edad aún no le podían dar las autorizaciones para laas intervenciones quirúrgicas recomendadas, pues aún no tenía la edad conveniente para ser operado. También afirmó que las entidades hospitalarias de cuarto grado, por orden del gobierno central, debieron suspender todo tipo de cirugía mientras atendían las prioridades derivadas de la pandemia provocada por el covid-19. Finalmente, Londoño confirmó que la EPS Convida ya le está prestando la atención requerida a Kevin Santiago Riveros Leal.
Lo importante es que el niño ya cuenta con la atención que necesita y que se espera que pronto lo lleve a recibir las cirugías que necesita para poder caminar como el quiere. Kevin es un niño fuerte y soñador, que gracias a la tenacidad de su madre y la generosidad de unos vecinos pronto podrá recorrer los verdes potreros de su vereda en Une por sus propios medios. Desde EL NIDO DEL CÓNDOR acompañaremos a Kevin en el cumplimiento de esa anhelada ilusión.