El departamento de Cundinamarca podrá pasar este fin de semana sin restricciones, declaró el gobernador del departamento, Nicolás García Bustos. No obstante, el mandatario aclaró en su comunicación que la decisión final correrá por cuenta de los alcaldes municipales si creen tener la necesidad de seguir aplicando la medida del toque de queda.

García resaltó que ha sido grande el esfuerzo que han hecho los comerciantes, agricultores e industriales cundinamarqueses para colaborar con las medidas restrictivas que han ayudado a bajar el ritmo de contagio del coronavirus. Gracias a ese esfuerzo se ha aliviado sustancialmente la presión en el sistema de salud departamental. “Han sido días difíciles, particularmente para los comerciantes de Cundinamarca. Nosotros, en estos días en los que pedimos un poco de sacrificio por parte de todos ellos, hemos logrado disminuir la ocupación de camas de cuidado intensivo y ampliar otras camas en algunos hospitales de nuestro departamento”, aseveró el Gobernador.
También insistió en enviar el mensaje a la ciudadanía para que continúe usando tapabocas, lavándose las manos con frecuencia y manteniendo el distanciamiento social. Por ahora, el Gobernador toma esta decisión pensando en la reactivación de la economía departamental, pero fuentes oficiales señalaron que, dependiendo del comportamiento del contagio de covid-19, podría volver a implementarse esta medida, aunque lo que se espera es que no sea necesaria.
Vale la pena señalar que, a pesar de que no habrá toque de queda total en los 116 municipios del departamento, se mantienen las restricciones de movilidad y la ley seca entre las 8 de la noche y las 5 de la mañana de cada día entre el viernes 30 de enero y el lunes 1° de febrero.