A pesar de la crítica situación por la que atraviesan los cundinamarqueses debido a la pandemia por covid 19, algunos gobiernos locales no cejan en su empeño de aumentar los impuestos a sus ciudadanos, en especial el predial. La semana pasada se registró el caso del municipio de San Francisco de Sales, en donde la comunidad ha protestado varias veces contra la medida tomada por el alcalde Gonzalo González.
Ahora el turno es para Soacha. El alcalde Juan Carlos Saldarriaga ordenó una actualización catastral, la cual no se socializó convenientemente, además de que la comunidad no tiene ni idea sobre los criterios en que se basó dicha valorización, porque fue excesiva.
Varios cobros en poder de EL NIDO DEL CÓNDOR revelan que el incremento del predial en Soacha alcanza cotas exageradas que pueden ir desde el 100 hasta el 500 por ciento. En 2020 uno de los recibos observados fue expedido por un costo de $253.000. Este año el nuevo cobro llegó por $1’078.000.
El pasado 16 de febrero varios ciudadanos se reunieron en la noche en el parque principal de este municipio y realizaron una quematón de recibos con el objeto de llamar la atención al alcalde Saldarriaga sobre los cobros desorbitados y la imposibilidad de pagarlos en momentos en que las economías familiares están muy resentidas por los daños económicos que deja la pandemia, tales como cierre de negocios y pérdida de empleos.

Una de las líderes comunitarias que está liderando las protestas, María Amparo Chavarro, manifestó que le han hecho llegar las quejas de los muchísimos casos al Catastro, pero no les responden y los reclamos quedan sin respuesta. “La solución de ellos solamente es que tenemos que pagar. Dicen que pasemos un derecho de petición y nada más. Tengo casi 200 recibos en mi poder de personas que están inconformes con el cobro excesivo del impuesto predial”, señaló Chavarro.
El alcalde Juan Carlos Saldarriaga respondió que, aunque la medida sea impopular, es necesaria con el fin de lograr que Soacha recoja recursos por el valor real de los bienes inmuebles existentes en su territorio. “Soacha llevaba doce años sin actualización catastral. Fueron dos las administraciones que no habían tenido la capacidad de hacerlo. Eso ha conllevado a que tengamos ese salto tan grande en los avalúos y como consecuencia de eso tenemos ese aumento en el impuesto predial”, aseguró el burgomaestre.
El excandidato a la alcaldía y ahora concejal, Giovanni Ramírez, se mostró en desacuerdo con la medida por ser un mecanismo que se toma en plena emergencia económica. En su página de Facebook, Ramírez manifestó: “Presenté ante el Concejo Municipal la proposición que hemos elaborado de la mano y en trabajo conjunto con los concejales Heiner Gaitán y Camilo Nemocón, y que pondremos en consideración de la plenaria de la Corporación. La proposición lo que busca es poder suspender los efectos de la actualización catastral, para que se permita la corrección de lo errores, en búsqueda de un ejercicio de actualización catastral más cercano a la realidad de las familias soachunas, en donde no se cometan injusticias y se pueda efectuar un cobro del Impuesto Predial Unificado (IPU) sin que afecte la canasta familiar de los soachunos”.

Por ahora la comunidad sigue molesta con la medida del alcalde Saldarriaga de subir exageradamente el impuesto predial. En los próximos días se definirá qué pasará con esta decisión administrativa que afecta a cientos de miles de habitantes de este municipio cundinamarqués.