La Fiscalía General de la Nación, través de su Seccional Cundinamarca y con acompañamiento del Grupo de Acción Unificada para la Libertad Personal (GAULA) de la Policía Nacional, capturó a tres patrulleros de esta última institución. Los detenidos serían culpables de exigir dinero a personas con problemas judiciales, a condición de no capturarlos.
Los policías detenidos fueron identificados como Iván Darío Mejía Díaz, Campo Segundo Escobar Jiménez y Jesús Yoleanis Parra Carrillo. Los agentes del orden estaban adscritos a la Policía de Soacha (Cundinamarca). Su modo de operar consistía en instalar falsos controles en las vías donde retenían a aquellas personas que tenían orden de detención por la comisión de delitos. Allí los extorsionaban y, para soltarlos, les pedían sumas entre los 5 y los 12 millones de pesos.
Según las investigaciones adelantadas por la Fiscalía, los uniformados utilizaban las horas de la noche para cometer sus fechorías. Además, se pudo determinar que usaban personas que entregaban falsas vesiones que agravaban la situación de los detenidos, por lo que éstos sucumbían a la presión y accedían al pago de la suma solicitada por los policías. Se estima que los patrulleros alcanzaron en ocho diferentes oportunidades a obtener unos 50 millones de pesos en extorsiones.
Momento en que uno de los policías de Soacha es detenido por el cargo de extorsión.
Uno de los casos registrados ocurrió el pasado 11 de mayo. En un retén instalado por estos policías detuvieron a tres personas bajo el cargo de porte de estupefacientes. Para ser liberadas las personas retenidas tuvieron que reunir 5 millones de pesos para entregárselos a los agentes de la Policía. Con el pago en sus bolsillos los patrulleros soltaron a estas personas y no reportaron la detención.
La fiscal encargada de atender el caso determinó imputar los delitos de concusión, cohecho propio, concierto para delinquir y secuestro extorsivo a los agentes de la ley. Por su parte un juez de control de garantías ordenó la detención de los uniformados en establecimientos carcelarios.