Esmeralda Pussy Cat, es la última sala de cine porno que aún sigue abierta al público en la capital del país. En esta sala, los clientes además de ver películas, cuentan con un sex-shop para hombres y mujeres. Este teatro cuenta con cabinas personales que por diez mil pesos adicionales a la boleta ofrecen a los visitantes 15 minutos de privacidad. Dicho lugar, alternativo, oculto y prohibido es un establecimiento completamente legal, que desde 1985 ha ofrecido películas porno a todos sus visitantes, año en el que pasó de ser un cine familiar a ofrecer una alternativa a la curiosidad y el morbo de los bogotanos.
Interior del teatro Esmeralda Pussycat.
https://soundcloud.com/rolando-l-pez-993830677/esmeralda-pussycatt-1
